Una de bermudas y chanclas


Ya estabamos un poco cansados de la agotadora ciudad,de su trafico, bullicio y de sus 20 millones de habitantes… Decidimos irnos a descansar a una de las playas mas famosas del globo.
Fuimos a la estacion de trenes de mumbai, todos sabemos que las estaciones son agotadoras, pero Victoria Station es la estacion de una de las ciudades mas caoticas del mundo, era un auntentico caos, miles de personas corriendo hacia su tren, nosotros sin saber que hacer, sin saber donde estaria nuestro tren, preguntamos en la ventanilla, apenas quedaban minutos para que nuestro tren saliera, cuando estaba apunto de salir empezamos a correr en su búsqueda, lo encontramos cuando iba a salir y por eso nos metimos en el primer vagon que encontramos, pero fue una mala idea, era el vagon de las mujeres y por primera en vez en el viaje las mujeres indús nos dirigieron la palabra aunque fuera gritando, comprendimos que no eramos bien recibidos y casi sin tiempo nos cambiamos al siguiente vagon. El tren echo a andar. Sin saberlo habiamos entrado en lo que en occidente conocemos como animal class, viajando con el pescado fresco, el olor de el pescado era incluso mayor al de los pasajeros de este vagon, con el paso de los segundos comprendimos que el pescado no era tan fresco… Cuando el tren hizo su parada en la siguiente estacion, nosotros cambiamos de vagon, y por fin encontramos nuestro vagon cama, que aun siendo una verdadera porqueria nos sentimos muy comodos y contentos con el cambio.

Pasaron horas, tal vez 15 hasta llegar a nuestro destino, estabamos agotados pero sedientos de tranquilidad y de mar. Por fin llegamos a goa, la primera sensación fue increíble, jamas habia estado en unas playas como esa, virgen, selvatica, espectacular.
Buscamos un lugar donde alojarnos, unas habitaciones frente al mar, con unas vistas maravillsas, este sitio no tiene precio aunque nosotros pagamos euro y medio por noche. En un principio ibamos a quedarnos una semana alli, pero pronto nos dimos cuenta que una semana en el paraíso no seria suficiente, por ello lo alargamos hasta 3, quizas nos quedamos corto.

Nuestra estancia se puede resumir en largos baños, zumos de frutas, horas de sol, buena comida, paseos en moto por entre la selva… vamos lo que conocemos como vivir. Imagino que el paraíso será casi gratis. Una de las ultimas noches decimos irnos de juerga goana, preguntamos y alli fuimos. En un principio todo era un poco raro, porque habia muchisima gente pero nada de musica, cosa que no nos gustaba en absoluto, queriamos bailar. Cuando entramos vimos a la multitud bailando, no entendíamos nada, bailaban fatal.¿ Donde se ha visto un guateque sin musica??.Pronto lo entendimos, la gente bailaba porque cada uno tenian unos cascos donde seleccionaba su canal, la verdad es un sistema fantastico, deberian adoptarlo en todas las salas, de esta forma no tendriamos que bailar cualquier cosa.

Se que goa da para escribir mucho mas pero dedicando tanto tiempo a vivir, no me quedaba ni un minuto ni siquiera para escribir dos lineas mas. Esta tarde cogere un autobús que me llevará a Hampi, el trayecto dura otras 15 horas, pero Buddy Holly llenara el camino con su musica. Los cascos siempre fueron geniales.
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